lunes, julio 19, 2004

Conversacion extraña

"La esperanza es el peor de los males, pues prolonga el tormento del hombre."
(Nietszche)
 
 
Y se encontraron frente a frente, despues de tanto esperar por fin se han encontrado...
-Buenas tardes  -dijo el hombre de blanco
-Que pueden tener de buenas, observa cuanto sufrimiento me has dejado causar. -dijo el
-Si vinimos a hablar sobre estos temas sera mejor que nos sentemos - sugirio el hombre de blanco
-Odio que tengas razon pero esta bien - murmuro El  en tono despectivo
 
Ellos eran dos seres totalmente opuestos, el hombre de blanco era bondadoso y paciente, en cambio "el" era cortante y frio por no decir impacientey nada amable.
 
-Que nuevas me traes eh? - dijo alegremente el hombre de blanco
-Absolutamnete nada nuevo, lo de siempre, todos se matan unos a otros en tu nombre, tienes esclavizada a la mayor parte de la humanidad, y les les has lavado el cerebro, y lo peor de todo es que  de todo lo malo que les pasa por extrañas razones me hechan la culpa a mi... - grito algo enojado el

tienes alguna idea de que por que pase eso - ahora el lo dijo mas calmado
 
-Ni la mas remota idea -susurro lentamente con una sonrisa sarcastica el hombre de blanco.
-Deja de hacerte el inocente ¿Quieres? -dijo el en tono cansino
-En serio no se porque te hechan la culpa a ti
-el ya no resistio y exploto diciendo:Jajaja dejate de juegos durante los ultimos milenios me han culpado por todo lo malo que les pasa, y todo es por ti .
-Esta bien basta de juegos -dijo el hombre de blanco

Empezo a caminar por toda la estancia pensando hasta que por fin dijo:
-Asi es mi forma de gobernarlos, mientras ellos creen que tu los posees, les robas sus alimentos, que eres el culpable de sus desgracias, el culpable de la maldad en la tierra, yo recibo todo el credito, ¿te agrada mi forma? asi es mejor porque a mi me rinden culto y me ruegan. y tu solo eres el pobre diablo que recibe los insutos
-Eres despreciable, por lo menos diles que tu eres el culpable de la maldad y no yo a ver si ellos siguen creyendo en ti - dijo el en un tono de peticion pero nuna de suplica.
-jajaja y arruinar el teatro no gracias. Hasta luego. -dijo el hombre de blanco
 
Entonces "el" se dio media vuelta y se fue indignado.